Tú bajas de los cielos Oh Rey altísimo y vienes a una gruta, al frío al hielo; Oh mi Niño Divino: yo te veo aquí temblar. Oh Dios Santísimo: ¡Ay, cuánto te costó haberme amado.
Tú bajas de los cielos Oh Rey altísimo y vienes a una gruta, al frío al hielo; Oh mi Niño Divino: yo te veo aquí temblar. Oh Dios Santísimo: ¡Ay, cuánto te costó haberme amado.