Recitado Ya que el aplauso soy más eloquente, elevo justamente del inclito Tomás las altas glorias, en eternas memorias. Soy quien immortalizo cuando fiel solemnizo; con que en su obsequio por diversos modos mi fineza encarezco más que todos. Aria ¿Quién ha de poder sondar el profundo y vasto mar de tu mérito y valor? Si en lo heroico de tu ser, tuvo el cielo que admirar, en tu angélico candor.