Ah, señores, los del buen gusto, háganse, por vida mía a mis tonos. Oiganme una tonadilla con que celebrar intento a un cordero de aquí que el sol brilla. Oigan, miren, escuchen, atiendan: Esto sí es morir de risa! Coplas: 1. A questa digo, señores palabra la más divina que ideó el orden supremo para nuestra maravilla. 2. Sus harpones y sus flechas con herirme me cautivan quando me las arroja siempre el corazón me tira.